Pilar 5

Régimen fiscal e institucional
virtuoso, gobernanza y
vocación territorial

La institucionalidad en torno a la actividad minera es un factor prioritario para el buen desarrollo de la misma. Igualmente lo es un adecuado clima de negocios, ya que Argentina enfrenta una serie de desafíos económicos que se hace necesario abordar. También, es fundamental la buena inserción territorial de la actividad minera en la comunidad para lograr la aceptación y aprecio mutuo; a esto, le llamamos vocación territorial.

Este pilar analiza los aspectos relativos al marco institucional y legal en torno al desarrollo de la minería, las condiciones del clima de negocios para las empresas mineras y los elementos relevantes para la inserción territorial y el desarrollo de una agenda de acción colectiva de calidad para el sector.

MARCO INSTITUCIONAL Y LEGAL

El Código de Minería de la Nación Argentina tiene rango de ley nacional (N° 1.919), encontrándose por debajo de la Constitución Nacional y los tratados internacionales, y por encima de las normas que dictan las provincias.

El código sustancial se sancionó en 1886, y rige los derechos, obligaciones y procedimientos referentes a la adquisición, explotación y aprovechamiento de las sustancias minerales. Así también, establece el dominio de las minas, las cuales pertenecen al Estado y se les otorgan a los particulares a través del sistema de la Concesión Legal. A lo largo de los años, dicho cuerpo normativo ha sufrido ciertas modificaciones: En el año 1980, con la Ley N° 22.259 que estableció modificaciones al sistema de amparo de las concesiones; en el año 1993, con la Ley N° 24.224 de Reordenamiento Minero y creación del Consejo Federal Minero y en el año 1995, con la Ley N° 24.585 que incorporo una sección de Protección Ambiental para la actividad minera.

El Código de Procedimiento Minero de la provincia de Mendoza fue publicado en el año 1945 (Decreto N° 299-E-1945) y regula las formas en que se otorgan, mantienen o se pierden los derechos mineros, y los de concesionarios y propietarios del suelo, entre otras herramientas jurídicas. Esta norma tiene como principio el impulso procesal de oficio por parte de la Autoridad Minera y la Concesión Provisoria, que en el Código de Minería se menciona como un registro previo a obtener la Concesión. Este último registro tuvo en miras generar una herramienta legal que le permitiera al titular del derecho poder iniciar las actividades mineras antes de obtener la Concesión que normativiza el Código de Minería, es decir, antes de comunicar la Labor Legal, Peticionar y efectuar la diligencia de Mensura.

En la actualidad, se suman requisitos ambientales (Ley N° 24.585; Ley N° 25.675; Ley Provincial N° 5.961, Decreto Provincial N° 820/06, entre otros) y es útil para avanzar en los trabajos de actividad minera una vez que se tenga aprobada y ratificada la Declaración de Impacto Ambiental (DIA).

La legislación de Mendoza exige que la empresa minera cuente obligatoriamente con la aprobación del Informe de Impacto Ambiental (IIA) antes de iniciar cualquier actividad minera. Para obtener esta aprobación ambiental, se deberá presentar un IIA, y la autoridad de aplicación se expedirá aprobándolo o rechazándolo en forma expresa a través la DIA.

Obtenida la aprobación del IIA para “proyectos de minería metalífera obtenidos a cualquier método extractivo para las fases de cateos, prospección, exploración, explotación, o industrialización”, se exige, a través de la Ley Provincial N° 7.722, que dicha aprobación sea ratificada por la Legislatura provincial. Esta misma ley prohíbe también el uso de cianuro, ácido sulfúrico y mercurio en los procesos mineros de minerales metalíferos.

Para incentivar el desarrollo minero, el Gobierno provincial creó Impulsa Mendoza Sostenible S.A., con el fin de administrar y cumplimentar la venta de PRC S.A.U. y actuar como un agente de promoción minera. En marzo de 2024, se presentó un proyecto para un nuevo Código de Procedimiento Minero que reemplace el antiguo Código de 1945, el cual fue recientemente aprobado. El nuevo Código busca agilizar los procedimientos administrativos para facilitar el avance de los proyectos mineros, incentivar la exploración y modernizar los controles.

CLIMA DE NEGOCIOS

Desde el punto de vista del clima de negocios, podemos observar un fuerte deterioro que ha repercutido en el desarrollo de Argentina, en comparación con otros países. Tomando como referencia el periodo 2013-2023, el PBI de Argentina cayó un 1,8%, mientras que países vecinos de la región como Chile y Perú, que también buscan atraer inversiones mineras, registraron crecimientos superiores al 20%, y otras economías más desarrollas que también se dedican a la minería (Canadá, Australia y China) crecieron por encima del 17% (IMF WEP, 2023).

Uno de los principales motores de desarrollo de los países es la inversión, ya que impulsa mayores niveles de productividad, y por lo tanto un desarrollo sostenible con salarios crecientes. Para promocionar la inversión, los países deben ofrecer un marco de estabilidad amplio y un adecuado nivel de competitividad. No es casual de que los menores niveles de crecimiento registrados en Argentina se asocien con menores niveles de inversión, mayores niveles de inflación y riesgo país, menor acceso al crédito, mayores desequilibrios presupuestarios, mayores cargas tributarias y cambios permanentes en las “reglas del juego”. Todo lo anterior resta estabilidad, previsibilidad y competitividad al país.

Además del desequilibrio económico de Argentina, a las empresas mineras que desarrollan las actividades comprendidas en el Código de Minería se les aplica el régimen tributario general con determinados beneficios para los proyectos que adhieran a la Ley Nacional de Inversiones Mineras N° 24.196 (LIM). Esta otorga beneficios tales como: estabilidad fiscal, importaciones sin gravámenes, promoción a la exploración, amortización acelerada y tope de regalías provinciales. Sin embargo, la evidencia empírica arroja varios ejemplos en los cuales la LIM no ha logrado otorgar la estabilidad que presume, como tampoco mecanismos más eficientes para su funcionamiento e instrumentación.

VOCACIÓN TERRITORIAL

La vocación territorial se refiere al grado de legitimidad social o territorial que posee una actividad y/o proyecto. En el caso de la minería, a nivel global, lograr la legitimidad social es un desafío debido a que es una actividad poco visible para gran parte de la sociedad, ya que comúnmente las minas se encuentran alejadas de los centros urbanos, desarrollándose muchas veces en territorios con poca o nula experiencia minera, lo que representa un cambio en sus usos y costumbres. En general, no tiene una connotación positiva debido a los impactos socioambientales que usualmente se le asocian.

En la provincia de Mendoza, a partir del año 2005, se han observado reacciones sociales en contra del desarrollo minero, apoyadas en una arraigada conciencia social sobre la importancia del agua para el desarrollo productivo de los oasis agrícolas en el desierto. Esto llevó a considerar a la minería como una amenaza por la demanda de agua que requeriría y el riesgo de contaminación de sus ríos. Este temor no estaba asociado a la falta de legislación, pues el Departamento General de Irrigación regula y controla el uso del agua, sino a la desconfianza en los controles ambientales, o la carencia de ellos. Debido a esta preocupación, en el año 2007, se sancionó la Ley N° 7.722 que prohíbe el uso de ciertas sustancias químicas utilizadas en la minería metalífera.

Abordar este gran desafío involucra a la comunidad, los gobiernos y las empresas, y debe tratarse en forma respetuosa entre las partes, buscando que la comunidad se sienta protegida y partícipe del desarrollo de los proyectos mineros. La minería moderna y sostenible sabe valorar a la gente, a la comunidad y el territorio donde se desarrolla, y busca trabajar en forma mancomunada para mejorar esa relación y desarrollar políticas participativas y transparentes.

ANÁLISIS FODA: FORTALEZAS, OPORTUNIDADES, DEBILIDADES Y AMENAZAS

Fortalezas

INSTITUCIONALIDAD

  1. Cuerpo normativo robusto en una provincia identificada con la fortaleza de sus instituciones.
  2. Existe un sistema de estadísticas sectorial respecto a la actividad minera en Mendoza.

 

CLIMA DE NEGOCIOS

  1. Ley de Inversiones Mineras N° 24.196.
  2. Estableciendo un marco regulatorio que busca fomentar la inversión y desarrollo en el sector.
  3. Devolución del IVA para la exploración minera.
  4. La tribulación del sector minero contribuye significativamente a las arcas públicas.
  5. El PEN dictamino el DNU N° 234/2021: Crea el Régimen de Fomento de Inversión para las exportaciones.
  6. Exportaciones. Incentivos de inversiones en proyectos productivos, incluyendo actividades mineras.

 

VOCACIÓN TERRITORIAL

  1. Infraestructura en universidades, centros de investigación, escuelas técnicas, empresas, etc., para capacitar en nuevas y actualizadas tecnologías a los profesionales relacionados con la industria.
  2. Capacidad de recurso humano y técnico para llevar adelante los cambios necesarios y los controles requeridos por la industria.
  3. Existencia de vocación territorial en Malargüe Distrito Minero Occidental.
  4. Creación de la empresa Impulsa S.A. como ente promotor de fomento de la industria minera.

Oportunidades

INSTITUCIONALIDAD

  1. Celeridad del procedimiento administrativo, bajo la reforma del Código de Procedimiento.
  2. Posibilidad de cumplimiento con las normas existentes de acceso a la información, creando confianza al pueblo mendocino.
  3. En la Provincia, existen diversas uniones o cámaras empresariales, clústeres, cámaras de servicios, entre otras tantas asociaciones, que no están coordinados para la acción conjunta de fines concretos, como el desarrollo de la industria minera.
  4. Posibilidad de gestionar un buen uso del suelo provincial y establecer objetivos para el desarrollo sustentable del territorio, la armonización de las actividades humanas con el cuidado del ambiente y el acceso de la población a un hábitat adecuado.

 

CLIMA DE NEGOCIOS

  1. La Ley 24.196 ha propiciado el desarrollo de varios proyectos de envergadura a nivel nacional, como “Alumbrera” en Catamarca, “Veladero” en San Juan, “Cerro Vanguardia” en Santa Cruz, entre otros.
  2. Los gobiernos pueden fomentar que la actividad traiga nuevas inversiones extranjeras y de este modo se obtiene una mayor tributación en beneficio del país.
  3. Aquellas empresas que sí pudieron importar, lo hicieron a un dólar oficial.

 

VOCACIÓN TERRITORIAL

  1. Establecimiento de parámetros con estándares internacionales desde el inicio de la industria, aportando la normativa y la capacidad técnica del recurso humano y haciendo partícipe a la ciudadanía en monitoreos.
  2. Presentación de propuestas educativas y de capacitaciones para informar a la sociedad sobre el desarrollo y beneficio de la industria minera.
  3. Convocar a distintas instituciones educativas (universidades, escuelas técnicas, consejos, colegios, etc.) a realizar convenios y pasantías con entidades del Estado y privados, para aprender y formar parte del desarrollo de la industria.

Debilidades

INSTITUCIONALIDAD

  1. Bajas partidas presupuestarias en los organismos de control ambiental y minero.
  2. La Dirección de Minería cuenta con un reducido número de profesionales que realizan múltiples tareas, ejerciendo funciones de evaluación, análisis y opinión en los distintos procesos.
  3. Poca confianza en la información existente ya que la misma no está actualizada ni resulta práctica.
  4. Alto grado de desconocimiento e información de la industria como actividad productiva en amplios sectores tanto gubernamentales como sociales.

CLIMA DE NEGOCIOS

  1. Falta de efectividad del sistema, pues a muchas empresas no le ha sido fácil la devolución de los tributos que la ley establece como beneficios debido a un procedimiento administrativo deficiente.
  2. Dificultad para obtener la devolución del IVA, atento al burocrático y deficiente sistema de tramitación.
  3. Carga tributaria alta y regresiva, consecuencia mayor informalidad laboral y evasión fiscal, aumento de costos y baja de la productividad, caída de las inversiones y exportaciones y menor eficiencia y equidad tributaria.
  4. Argentina presenta impuestos que nacen como temporales, y se vuelven permanentes.
  5. Alta inflación y deuda pública, baja estabilidad del tipo de cambio.

VOCACIÓN TERRITORIAL

  1. En Mendoza no ha existido una cultura educativa vinculada a la minería. Hay falta de información y existe un sesgo informativo y comunicacional.
  2. Falta de implementación de una política de Estado para el desarrollo de la industria durante mucho tiempo.
  3. Falta de credibilidad en los controles por parte de entes estatales y privados.

Amenazas

INSTITUCIONALIDAD

  1. Falta de credibilidad en los controles ambientales.
  2. Escaso acceso a la información por parte de particulares y la sociedad en general.

 

CLIMA DE NEGOCIOS

  1. Muchas veces los tributos resultan confiscatorios al capital y a la renta de las empresas.
  2. La experiencia ha demostrado que el Estado en sus tres esferas (nacional, provincial y municipal) crea o modifica el régimen tributario, alterando así la estabilidad fiscal y debilitando la seguridad jurídica.
  3. Alta inflación y deuda pública, baja estabilidad del tipo de cambio.
  4. Dificultades circunstanciales para importar productos necesarios para la industria minera.

 

VOCACIÓN TERRITORIAL

  1. Existencia de grupos de personas y organizaciones con carácter opositor al desarrollo de la industria, con gran poder de convocatoria y movilización, que tiene un gran impacto en la sociedad en general.
  2. Generación de falsa información y noticias.
  3. Importantes sectores de la industria mendocina que no respaldan el desarrollo de esta industria para la ampliación de la matriz productiva de la Provincia.

Iniciativas tempranas

Se identifican diversas recomendaciones o acciones prioritarias. En el ámbito institucional, se requiere potenciar tanto la Dirección de Minería como la Dirección de Protección Ambiental en términos de personal técnico capacitado y con herramientas prácticas de gestión, de control y fiscalización de la actividad. Mejorar la coodinación de la autoridad de control, para que pueda fortalecer la agilidad de los procedimientos de evaluación. Se debe promover, con prontitud, la coordinación
de entidades estatales y privadas para el análisis conjunto de temas de interés y la toma de decisiones con objetivos comunes. Al momento de redacción de este informe, se entiende, en base a información pública y discursos de funcionaros, que la Provincia se encuentra yendo en esa dirección. 

Es esperable que el clima de negocios y la competitividad se vayan corrigiendo en la medida en que el Gobierno nacional logre algunos objetivos macroeconómicos y las reformas estructurales básicos (equilibrio fiscal, precios estables, reducción de la carga tributaria, promoción del empleo registrado). avanzando en sistemas fiscales y cambiarios más eficientes y previsibles, evitando modificar “las reglas del juego”. Asimismo, entendemos que el Régimen de Incentivos a Grandes Inversiones (RIGI) que actualmente se está debatiendo en el Congreso Nacional, puede generar beneficios y aportes en la materia.

En materia de gobernanza para la inserción territorial y de acción colectiva, una primera acción prioritaria es generar información robusta y en los formatos adecuados, respecto de todo el desarrollo y proceso de la industria, sus beneficios e impactos. Esto se puede llevar a cabo iniciando o reforzando propuestas educativas para los actores relevantes, en conjunto entre el sector público y privado. Un segundo ámbito de acción es avanzar en sistematizar la información respecto de las mejores prácticas de la industria minera en la materia, reflexionando sobre los principales desafíos territoriales que surgen desde la provincia de Mendoza, para poder adaptar dichas prácticas a la realidad provincial. La experiencia de provincias y países vecinos (San Juan, Catamarca, Chile y Perú) y la mejor práctica de la industria a nivel global son un buen punto de partida.